viernes, 23 de enero de 2009

Ella

La descripción que a continuación podrá ser leída corresponde a alguien que de verdad existe, pero del cual no revelaré la identidad. Principalmente porque no quiero causarme problemas.

Ella, es una mujer. No se trata de una anciana ni de una persona de avanzada edad, sin embargo su rostro se asemeja al de cualquiera de las anteriores. Las especulaciones sobre su edad son aún persistentes hoy en día, sin embargo nadie conoce la verdad.
Su tez, lívida, cadavérica, desvaída y macilenta. Sus ojos, incrustados en la cara a presión, hacen lo posible por no caerse de sus órbitas. Su mirada es completamente fulminante. Sí, fulminante.
En mi vida había visto unos ojos que hablasen tanto. Las palabras no hacen falta cuando te encuentras ante ella, un movimiento de los ojos dice más que cualquier palabra. Os lo prometo, éstas se convierten en inútiles en su presencia. Esos ojos grises que resaltan más que nada en su níveo rostro, desvían la atención de su cuerpo, flácido en una primera ojeada, pero férreo en su interior.

Mis latidos se agitan cuando escucho su caminar. ¡Tac! ¡Tac! ¡Tac! ¡Tac!... Sus bajos, pero ensordecedores tacones resuenan en mis oídos cuando comienza a atravesar ese pasillo. Mi mente piensa qué decir; un "hola", un "buenas tardes"... Todos mis pensamientos son en vano. Cuando la veo, sólo puedo mirar esos ojos, abiertos como ventanales. En cuanto entra, se hace el silencio. Todo el mundo la teme, todo el mundo se tensiona. Su caminar resuena de nuevo, sin embargo, nunca aparto mi rostro del frente.

Comienza a hablar. Seria, pasiva, enfadada con el mundo. Mis ojos se desvían a sus arrugadas y afiladas manos. Por un momento solo consigo ver esas manos. No consigo oír nada.
Doy un giro brusco con mi cabeza y consigo librarme de su hechizo. Su voz comienza a sonar lenta pero enérgica.
No permitas que se dirija a ti en ningún momento. Te sentirás siempre ofendido.
A veces me pregunto cómo alguien puede ser tal sumamente cruel. Mucha gente piensa que la gente así lo hace por algún bien para el colectivo, pero no encuentro ese bien. Aún sigo buscando una razón que comience a resolverme algunas dudas internas.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Ella es una mujer que puede parecer extraña.

A veces lo que hace falta para conocer a fondo a algunas personas son unas cortas palabras, pero con Ella no sabría que decirte.

Tal vezs en su misterio y crueldad encuentres alguna respuesta a las dudas.

Besos

David MvD dijo...

Pues a mi me da que tú estás describiendo a una de tus profesores xDD

Anónimo dijo...

Obvimente hablas de una profesora xD la tipica profesora de historia que esta enfadada con el mundo, o de filosofia, que solo habla habla y habla en clase, luego los examenes son una putada y encima nunca te ayuda en nada y cuando le prguntas dudas te dice, "miralo en el libro" xD

Anónimo dijo...

yo x el horario y la descripcion creo que es una de las profes de tu academia jeje

AINA dijo...

Creo que la única que acertaría soy yo... Pero no voy a revelar su identidad, porque has olvidado decir algo amigo mío: ELLA es omnipresente. No intentes huír de su eléctrica mirada (que no es gris, pero que es de un color que no puede ser nombrado...), no pretendas esconderle algo. Sus pupilas atraviesan tu alma y descifran cada gesto de tu rostro... No intentes caerle bien para esquivar su crueldad, porque de eso tiene para todo el mundo (más para unos que para otros). Sólo respeta a UNA persona. ÉL. (Algún día tienes que hablar sobre ÉL, vale?) El resto de la humanidad somos escoria. Somos un desecho.
A mi esta persona, lo que me inspira es aprensión... Aunque, por muy contradictorio que parezca, me llena de admiración...
Parece una relación amor-odio, aunque ella solo entienda una: la INDIFERENCIA.