domingo, 4 de enero de 2009

39th Memory

Y aquí me hallo de nuevo, tal como aquel día. Sentado. Mirando a través del cristal. ¿Diferencia? Mi madurez ha aumentado y ya no llueve. Estoy sentado en una silla. Es cálida. De nuevo, mi mente se encuentra cargada de cosas. Información que va de un lado para otro, que intenta ser analizada. No, no puedo. Por más que le doy vueltas no consigo sacar nada en claro. No hay solución.
Cierro los ojos. Intento, aunque sea por un momento, dejar de pensar. ¡Alto!
Falsa alarma.
Por más que pruebo a no pensar, las dos grandes gotas de agua que comenzaron los problemas no cesan de crecer. Su onda al caer en mi mente, sigue expandiéndose. Se expande de tal manera que consigue apoderarse de gran superficie de mis pensamientos. No consigo ver otra cosa. Flashes de palabras lloran por mis ojos: falsedad, corazón roto, soledad, soledad, soledad, soledad...
No puedo evitar que se repitan. Cierro los ojos. Lo comienzo a ver todo con algo más de calma.
Si los abro, volverán los flashes, pienso.

Todos los sonidos se han abstraido. Tan solo me quedo con aquellos imposibles de abstraer. Oigo mi respiración. Puedo, incluso, visualizar como el aire entra y sale por mi boca. No hace frío. Mi cuerpo permanece cálido, mientras mi error de dejar la ventana abierta congela toda la sala. Mi cuerpo parece no inmutarse. Se muestra pasivo a toda sensación externa. Interiormente es un volcán a punto de explosionar. Siento como esa lava de pensamientos sube por mi garganta. No sé cuánto podré contenerla.

3 comentarios:

JAVI dijo...

Que profundidad, que brillantez, que desesperanza y ganas.

La meta se puede conseguir siempre que uno le ponga enpeño y no sucumba al desasosiego, quedarse inmobil, y ver como pasa el tiempo no te aliviara, levanta y enfrentate a ti mismo y a tu temor.
un abrazo.

Anónimo dijo...

No sé como contienes a veces eso, las emociones simplemente salen y no podemos controlarlas, pero bueno, hoy tú estas un poco controlado al no saber como pausar todo.

Solo espero que puedas respirar y vivir más.

Besos

Anónimo dijo...

No dejes de respirar, hay que dar rienda suelta a las emociones aunque sea a solas, pero deja que fluya lo que sientes