A little bit tired

Queridos lectores y amigos, ya ha pasado la semana estresante. Y quitando un último examen de filosofía de Kant, ha ido bastante bien. La historia del examen de filosofía no es muy pintoresca pero me animaré a contárosla.

He tenido examenes durante toda la semana, uno y a veces dos por día. El fin de semana anterior, estaba claro que no me daría para poder estudiar los examenes de toda la semana. Es algo lógicamente imposible. Por tanto, el examen de filosofía que era el jueves fue el que dejé para ultima hora. Lo que yo no sabía es que el miércoles por la noche que es el único momento en el que podía estudiar filosofía ya que durante la tarde sabéis que tengo mis clases de ballet y me es imposible estudiar, me iba a dormir. Sí, estaba en la cama estudiando y no sé cómo ni a qué hora, pero el caso es que me dormí. Me desperté allá por las seis de la mañana y decidí ponerme a estudiar y no acostarme.
Está claro que no me dio tiempo a preparar bien el examen.

Llegó el momento del examen, y cómo no, no me salió muy bien. Estuve realmente mosqueado con todos mis compañeros ya que yo a pesar de no haber podido estudiar, por razones obvias, fue legal y ni intenté copiar ni que me chivaran las respuestas ni nada de ese estilo. No obstante, mientras realizaba el examen se me ocurrió levantar la vista y echar un vistazo a mi clase en general. Mi impresión no cabía dentro de mi: todos con chuletas, o bien copiando... Muy fuerte...

Ahora comienza la "semana horrorosa". Hoy mismo, viernes, he tenido que faltar al instituto -justificadamente- ya que tuve un ensayo realmente largo. Duró desde las 10:00h de la mañana hasta las 20:45h. Estoy que me cuesta escribir. De todas maneras, estoy feliz ya que ha sido un buen ensayo.

Mañana tendré ensayo de nuevo, y el domingo también. Después, el jueves ya termino definitivamente todos los examenes y las clases del instituto. El 21 será mi graduación y podré estar "libre".