La semana de malestar físico parece que toca a su fin. Después de dos días tomando antibiotico ya me encuentro muchísimo mejor y probablemente mañana por la mañana tomaré clase de nuevo a no ser que por algún casual me encuentre mal -que espero que no-.
De todas maneras, he tenido suerte de que mi hermana ya estaba aquí para poder cuidar de su hermanito enfermito. Así que todo ha ido mejor gracias a eso.
Y como recompensa pues hemos estado visitando Boston, comprando un montón de cosas -sobre todo esto, porque en mi vida he visto a una persona comprar tanto-. Pero todo bien.
Este viernes se presenta con mucha fiesta ya que este fin de semana es el orgullo aquí en Boston. Así que va a ser una locura. Ya se ve que hay más gays en la ciudad de lo normal, y eso siempre es bueno. Por el momento yo ya tengo entradas para Machine para mañana.
No puedo beber porque estoy con los antibioticos pero, algo es algo no. No me quejo.
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