Quedan 6 días para que mi madre y mi tía lleguen a Boston, 7 días para el ensayo general y 8 para el día de la actuación. Los ensayos comienzan a ser más intensos, lo que conlleva a un mayor y abundante número de lesiones -de varias intensidades-. Mis aductores vuelven a escena, no tan dolorosamente como la última vez, pero con ganas de tocarme las narices un poco.
Sin embargo, a pesar de que hoy por ejemplo no he tenido un buen día que se pueda decir, creo que estoy contento. Intentando, al menos, que esto no me afecte. No puedo permitirme pasar por otro período de depresión por lesión... Así que, mucho hielo, baños calientes y antiinflamatorios que queda muy poco para poder tomarme una semana libre y que todo mi cuerpo se relaje hasta volver a empezar de nuevo con la vista puesta en el intensivo de verano y mi nuevo año en Orlando Ballet.
Y con el fin del curso, llegan las despedidas, las lágrimas... y todos los momentos que a mi personalmente no me gustan nada.
El final de la actuación será emotivo...
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1 comentario:
Sólo se me pasa una palabra por la cabeza: Apasionante
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