Año más, muela menos

La estancia en Gijón sigue su curso. Un nuevo año y una muela del juicio menos.

La verdad es que 2012 ha sido un buen año. Han ocurrido muchísimas cosas buenas en mi vida y a pesar de que hay muchas cosas de las que uno siempre se arrepiente de haber hecho, hay una gran cantidad de cosas  de las que estoy muy orgulloso.

Nochevieja fue una noche larga. Todo comenzó muy bien. Estábamos todos juntos en 'El Gato Tuerto', aunque al cambiar de bar, acabamos por separarnos, pero es normal. La verdad es que a mi no me importó, pero sí que pensaba que íbamos a desayunar todos juntos por la mañana., cosa que no ocurrió.
Era de esperar. En cuanto nos enteramos que 'La Buena Vida', el lugar para dónde habíamos comprado entradas para Nochevieja, había cancelado su fiesta de Nochevieja tres días antes por motivos de licencias, estaba claro que no íbamos a quedarnos todos juntos.

Volviendo a temas más recientes he de decir que a pesar del miedo que tenía a sacarme una de las muelas del juicio, no me enteré de nada. Y lo cierto es que no me duele casi nada ya. La misma noche de la extracción pude cenar -cosas blandas por supuesto- y al día siguiente ya casi no me dolía nada.