Feliz Navidad

Ya en España y a día de Navidad. Este año un poco diferente. Pasando las Navidades con mis tíos y mis primos de Cataluña en Sabadell. Una noche loca, con 32 personas invitadas a la cena de Nochebuena en la Asociación Gastronómica de la que mi tío se encarga: villancicos, cinco cochinillos, salpicón de marisco y langostinos además de un buen vino y mucho, mucho cava. Y no podían faltar los turrones para finalizar la cena, así como un karaoke en el que muchos pudieron demostrar  sus "dotes de canto".

Y hoy, Navidad, pudimos ir a Barcelona de visita. Vimos todo el barrio gótico, paseamos por la Rambla y vimos algunas de las cosas que se pueden ver en unas 4 horas cuando tu familia anda muy despacio. Por lógica no da tiempo a ver muchas cosas. Pero estoy feliz. Especialmente después de tener una cena típica catalana de pan con tomate, queso, jamón serrano y salchichón. Echaba de menos todo este tipo de comidas.

Cuando lo pienso me doy cuenta del poco tiempo que tengo para pasar con mi familia en España. Especialmente con todas estas fiestas y cosas que hacer todo el día, los días se pasan tan rápido que parece que me voy a volver de vuelta a Orlando el próximo día.
Intento estirar y hacer algo de ejercicio porque tanta comida es sanísima, por supuesto, pero no es sana para mi trabajo. No sólo la comida, sino el no estar a tanta actividad física como estoy acostumbrado, hace que tus músculos se relajen y se contraigan -no de la manera de contracción común, sino un tipo de contracción por desuso que siempre ocurre- y luego siempre lleva un tiempo volver a estar de la misma forma en la que te marchaste. Pero, así es la vida.

De momento sólo puedo desear una Feliz Navidad a todos aquellos que me importan: mi familia, mis verdaderos amigos y por supuesto a todos aquellos que leéis mi blog y aquellos que siempre os molestáis en comentar y pasaros por aquí todos los días. Gracias.